Luego de una larga travesía vivencial, darle
forma ha sido lo más difícil; tengo muy buena imaginación y como valor agregado
puedo plasmar en un plano mental lo que quiero ciertamente… Lo complicado es
ejecutarlo, darle forma de realidad…
Esculpir un sueño requiere de paciencia,
constancia, deseo y acción en corto, mediano y largo plazo…
Trabajar en pro de la obra realizable del sueño
anhelado necesita de planificación, estrategia y estructura (si, hay que ver
los sueños como un proyecto), nada debe ser al azar, ni improvisado y mucho
menos tomando atajos…
De eso se trata la vida o mejor dicho; la buena
vida… De soñar, pero también de despertar y hacerlos posibles...
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